martes, 22 de julio de 2008

Summer Edition-CAPÍTULO 11

No pude seguir hablando con el master. ¡Aquella noticia ponía mi vida patas arriba!
La boda de un gran amigo como es el master para mí, no podía dejarme indiferente. El shock fue brutal… tanto que casi sentía la fe de la que me había estado hablando el señor Lucas.
Qué el master se casara me pareció en aquel momento el fin del mundo pues, su novia no vivía en Lleida y si contraían matrimonio, seguramente se fuera a vivir con ella. Significaba no tener cerca al colega que tantas manos me había echado en los momentos difíciles, hablar con el por teléfono en lugar de hacerlo compartiendo el momento, requería acostumbrarme a estar en segundo plano de preferencias…
Cogí el móvil con recelo y marqué su número de nuevo:
-Tio, lo siento, que antes se ha cortado…- mentí lo peor que pude
-Ya…- y él me captó, como de costumbre.
-Me alegro mucho por la noticia, supongo que terminarás por irte a vivir con tu pareja y todo eso…
-De hecho ya no estoy en Lleida -el mundo se derrumbó sin hacer ruido- No he querido hacer de mi marcha un drama, por eso he optado por no despedirme, sabes que no soy muy amigo de esos temas.
-Vale… bueno, pues eso, que me alegro por vosotros y que deseo que os vaya muy bien- dije al borde del llanto.
-¿Estás bien, fea?- preguntó
-Sí, tranquilo, no te preocupes, haz tu vida- contesté medio resoplando en forma de reproche.
-Cuídate.
-Sí, supongo que tendré que hacerlo ahora que tú no vas a estar.
-Nos oleremos pronto- prometió.
Sabía que el hecho de no tenerle para cuando le necesitara iba a darme bastante por el culo, así que decidí llevar mis pasos hasta el Blackberry.
El Blackberry es una coctelería bastante nueva en la calle Rovira Roure. El amo del establecimiento se había pasado algunos años de su vida haciendo cócteles en cruceros y, cansado del vaivén del mar, había decidido volverse a Lleida y abrir un local con esa especialidad.
Había decidido emborracharme a base de bebidas alcohólicas caras. La ocasión lo merecía. Para mí aquello significaba la despedida de soltero de uno de mis mejores amigos, solo que únicamente yo iba a brindar por él.
Entré y me senté en la barra. El Blackberry estaba prácticamente vacío. Pedí un Cosmopolitan que apuré en veinte minutos mientras aspiraba asquerosa nicotina de unos Nobel que ni siquiera me gustaban.
Los Cosmopolitan se fueron sucediendo uno tras otro y al quinto, el camarero decidió que me invitaba.
Aguantaba el peso de mi cabeza sobre el brazo derecho acodado en la barra. De espaldas a la puerta, sorbía el líquido rojizo con una pajita cuando oí una voz conocía tras de mí.
-Hola Ele
-Psé…- contesté despectivamente adivinando quién era.
Entonces John se puso frente a mí, me cogió la copa de la mano y, apartando la pajita por la que yo estaba sorbiendo, probó el Cosmopolitan.
-¿Esto bebes? ¿Cómo se llama?
-Cosmopolitan…
El amo del bar no tardó en dejarle la lista de los cócteles para que escogiera uno.
-No, gracias, no voy a tomar nada- se disculpó John- sólo vengo a buscar a esta señorita.
-Clado que sí que va a tomarse algo- repliqué- Estamos aquí reunidos en la despedida de soltero del master. Tienes que beber.
John se resignó mirándome con cierta lástima. Luego dirigió sus gafitas hacía las opciones de la lista.
-Un Bloody Mary, por favor- pidió.
-Bah, eres clásico hasta para eso, seguro que sólo follas en la postura del misionero…- quise mofarme con algo de elegancia.
-Nena, vas algo borracha… sino te lo demostraría- dijo haciéndose el interesante.
Sí, eso de hacerse el guai se le daba de muerte a John, ya me lo había demostrado antes. Le recordé entonces en el Smiling Jack con aquella chica abrazada a la cintura.
-¿Y tú qué? ¿Cuándo te sometes al matdimonio?- quise saber, aunque apenas podía hablar bien debido a las circunstancias etílicas.
-¿Qué?- dijo poniendo cara rara- ¡Si ni siquiera tengo novia!
-Pues yo te vi con una chica bailando al ritmo de Bad Case of Love en el concierto de los Hurricane Moners esos.
-Mr. Hurricane Band, dirás- me corrigió mientras cogía el vaso de Bloody Mary con puerros que le había servido.
-Sí, hijo, sí, como tú quieras llamarlos…
-Me ha llamado el master… me ha dicho que seguramente estarías aquí, emborrachándote a su salud.
-Clado, sí, sí, el master es Dios, el master es guai, el master blablabla…- me quejé arrastrando las palabras- Él siempde lo sabe todo sobre todos, siempde diene guardado un as en la manga, siempde le salen bien las cosas…
Se hizo el silencio. Estaba muy apesadumbrada y lo último que quería era que John cuidara de mí, de nuevo. Parecía que sólo podía encontrarle apurando varias copas de alcohol.
-Has venido a salvarme otra vez ¿no?
-Sí…
-No me has contestado a lo de tu novia.
-Era sólo un ligue esporádico.
Apenas conocía a John y aquél era un dato importante. Era de los que tienen ligues y se lo toman con toda la calma del mundo… era un vividor. Tal vez nos pareciéramos más de lo que yo pensaba.
El alcohol hace que las hormonas se vuelvan medio locas y, en un arrebato de seducción, decidí desabrochar un botón de mi camisa más. Pensé en despeinar mi pelo, pero seguramente ya estaría horrendo.
-John… ¿yo te gusto?- le pregunté poniendo carita angelical.
-Pues claro, Ele – respondió apartando la mirada, cosa que me hizo pensar que mi careto angelical no me había salido del todo a derechas.
Entonces me acerqué a él y mientras sostenía, seductora, mi copa, le pasé el dedo índice de la mano que me quedaba libre por la espalda y le susurré al oído:
-¿En tu casa o en la mía?

5 comentarios:

Anónimo dijo...

oleeee se calienta la cosa!!! ueeeeeeeeee queremos mas!!...

...aunque john no deberia aprovecharse de una chica en ese estado..

Anónimo dijo...

Así que el Master se casa... Pues si que te sabe mal...
Al menos tienes otra vez a John a tu lado...

Anónimo dijo...

Una de cal, una de arena. Como la vida misma.

Kalitro dijo...

Yo creo que le hubiese pegado más pedirse un Virgin Mary.

Anónimo dijo...

ei!nena, que m'enviarás les fotos???soc la Mireia del zappa, ja he vist que t'has passat pel meu blog!
el meu correu és yorik_2@yahoo.es!
Si us plau envia-me-les!!
Si nem aquest cap de setmana al zappa te dic algo, per si et vols apuntar!