viernes, 25 de julio de 2008

Summer Edition-CAPÍTULO 12

Al levantarme del taburete en el que me hallaba sentada, bebiendo desde hacía horas, el suelo empezó a zozobrar bajo mis pies.
Me mareé un poco, pero ahí estaba él, el galán de cine que en lugar de beber “Vodka con Martini, agitado pero no removido” pedía el cóctel más barato de la lista.
Pagué todas mis copas y la de John, confiando en que los número rojos desaparecieran de la tarjeta de crédito cuando el editor me ingresará el dinero pactado.
Empezamos a caminar por la calle. Una suave brisa soplaba entre los árboles de Paseo de Ronda y chocaba contra mi cara serenándome un poco.
-¿Me das la mano?- le dije a mi acompañante tímidamente.
-¿No te encuentras bien? ¿Te mareas?- me interrogó.
-No, es sólo que me apetece
John me cogió de la mano. Tenía un tacto suave, muy suave…tanto que parecía carecer de huellas dactilares. Disfruté del momento lo que mi borrachera me permitió.
Llegamos al portal de mi casa y abrí la puerta sin soltarle la mano, no fuera que se me escapara, otra vez. Le invité a entrar con gestos.
Me dí la vuelta para cerrar la puerta y las manos de John se posaron en mi cintura.
-Espera, déjame comprobar que no hay nadie en casa…- quise retrasar el momento, parar el tiempo.
El Ked’s, mi perro, sacó su cabecita por la puerta del comedor e hizo un ademán de ponerse a ladrar pero con una sola mirada de mi acompañante volvió a meterse en el comedor ipso facto. Mi hermana tampoco estaba en casa y mis padres seguían de viaje.
-¿Estamos solos?-preguntó.
Asentí con la cabeza y, miré hacía el suelo. El alcohol me había hecho menospreciar mi virginidad y en aquel momento no tenía otro deseo que perderla allí mismo.
John me cogió por la barbilla levantándome el rostro. Nos quedamos largo rato frente a frente y me perdí en la infinidad de su mirada. Entonces me besó. Fue uno de esos besos largos, de película, de los que ya no sé ven si no es en la gran pantalla y, de forma escasa. Fue un beso que, pensé, Tornatore podría haber incluido en su escena final de Cinema Paradiso.
Los besos y las caricias siguieron en el mismo recibidor. Sentí sus labios sobre mi cuello mientras sus manos se distraían por mi pelo y por mi espalda y, las mías bajo su camiseta.
Me apoyé en la pared, pues volvía a marearme de tener la boca pegada a otra y los ojos cerrados. Había perdido el mundo de vista y estaba en el lugar más hermoso del mundo, donde no existían el tiempo ni la prisa.
El sudor y las ansias se hicieron evidentes y, allí empezó a sobrar la ropa. Nos desplazamos hasta mi habitación entre besos y susurros.
John desabrochó mi camisa a toda prisa y empezó a besarme los pechos. Yo respiraba con dificultad y tenía una sensación extraña en el cuerpo, entre excitación y miedo.
Me veía torpe en aquella situación en la que era totalmente inexperta. Nunca había desnudado a nadie, y menos habiéndome bebido antes cinco cócteles. Le quité la camiseta a John y me senté sobre mi cama. Mi galán se aproximó lentamente y, ayudándome a recostarme, se puso sobre mí sin dejarse caer. Me rodeó con un brazo y noté que su mano intentaba hacer maniobras con el cierre de mi sostén. Intenté ayudarle, pero mi pelo se enredó en sus gafas y se le cayeron.
-Déjalas, le sugerí…
-No, sin ellas no veo nada y quiero grabar bien en mi mente este momento…
Aquella frase me llenó de ternura y de anhelos amorosos que no recordaba haber tenido nunca. Me hacía sentir especial.
Noté entonces que algo estaba siendo oprimido bajo los pantalones de John. Acaricié el bulto por encima de sus vaqueros poniéndole más nervioso todavía de lo que ya se estaba poniendo intentando descifrar como cojones de abría mi sujetador.
Cuando por fin lo consiguió y pudo sentirse orgulloso de si mismo, se dedicó a recorrer todo mi busto a base de besos. Yo le acariciaba la espalda que era suave como la seda, tan suave como había sido antes el tacto de su mano. Quería pedirle que apagáramos la luz para sentirme más cómoda, pero en mi cabeza latían las palabras “quiero grabar bien en mi mente este momento…” y no quise privarle de ello.
El resto de la ropa se vio desterrada al suelo de la habitación, quedando colgada de la silla o de alguna estantería. Aquello estaba apunto de caramelo y, lo que había visto en tantas películas estaba apunto de sucederme a mí
-Ve despacio, es la primera vez…
John puso cara de extrañado y creí que se iba a echar atrás.
-La primera vez en meses – intenté arreglar…
Me abrazó y siguió dándome besos sin dejar siquiera un capilar de piel por el que no pasaran sus labios.
Entonces sucedió. Recuerdo que me dolió un poco y no fue lo agradable que la gente decía que era. Noté mi entrepierna mojada y, el chico que tenía encima también lo notó. Sus ojos (gafas inclusive), se desviaron hacia la parte del bajo vientre y yo hice la mismo.
Había sangre, aunque no salía a borbotones. John se levantó y se apartó de mi asustado…
-¿Estas enferma? ¿Tienes algo contagioso? – me interrogó como si fuera un médico en apuros.
-¡No, claro que no!- me indigné.
-Estás sangrando… - y los ojos le brillaron, supuse, de terror.
Me avergoncé y cubrí mi cuerpo con las sábanas que había quedado desechas bajo nuestros cuerpos. Tuve ganas de echarme a llorar.
-Tengo que irme, lo siento. Deberíamos hacer como si esto no hubiera pasado nunca…- aclaró mientras se vestía.
-¡No! ¡Lárgate de esta casa! ¡Te odio! No quiero volver a verte nunca… - mentí a causa del orgullo que me quemaba las venas – Eres un monstruo.
Se fue y salió por la puerta dejando atrás un animal herido que llevaba mi piel. Me pareció oír que pedía perdón al otro lado de la pared del recibidor…

7 comentarios:

Anónimo dijo...

BRAVO!

que buen capitulo y que final!!

un 10!

Anónimo dijo...

very hot! pero el final m'he ha dejado a cuadros...

Kalitro dijo...

¡Ah, el desastre de la inexperiencia! ¡Qué hermoso todo!

Eso pasa por mentir, claro.

Anónimo dijo...

La primera vez siempre suele ser un desastre y no se parece en nada de lo que hemos estado soñando...

Anónimo dijo...

Que no actualizas!??!?!?!?!?!
Estas de vacaciones?!?
Quiero saber que pasa con John, con lo que tienes que escribir y con la puerta de la Mitjana!!

Anónimo dijo...

actualizas o que? :(

Anónimo dijo...

neni, quién es john? no será el señor lock? si lo es tu tienes mas cuchillos, matale

ahora te voy a comentar todas la publicaciones

pa joderte

jajaja

es bromique